Este vídeo de los Nokia Labs muestra cómo un dron instala una estación celular en un lugar predeterminado para el despliegue de una red en un área más amplia. Estas antenas, denominadas F-cell, funcionan con energía solar, y el fabricante las denomina «la auténtica tecnología sin hilos» dado que no necesitan cables ni para datos ni para la corriente eléctrica.
Sólo es un prototipo, pero la idea es que un conjunto de estaciones de este tipo (64 más exactamente) podrían desplegarse «bajo demanda» allá donde sean necesarias, sin apenas planificación ni la necesidad de trabajos de ingeniería civil. Llegas, lanzas el ejército de drones y tienes un área comunicada mediante 4G o 5G en cuestión de días, cuando no de horas.
Estas estaciones operarían con la tecnología 5G más moderna lo que permitiría una latencia muy baja y altas velocidades (se conectan con una antena central que comunica las 64 estaciones de forma simultánea). Además de eso las F-cells son autoconfigurables a medida que se despliegan. Una ventaja es que además no necesitan «línea de visión» pues las señales pueden atravesar edificios y otros obstáculos.