En 2013 Tim Dood fue el único pujador en la subasta de un traje de astronauta ruso — un traje de vuelo a gran altitud, para ser más exactos,
Cuando llegó el traje dentro de su enorme caja lo primero que pensé fue: «¿para qué leches he comprado esto?» Por supuesto, lo segundo que hice fue ponerme el traje. Dado que la mayoría de trajes de vuelo de segunda mano de la era soviética no traen instrucciones, forcé el cuello hasta que el casco se fijó en su sitio. Lo que no sabía yo era que con el casco puesto el traje se vuelve totalmente hermético... lo cual, por supuesto, casi me vale el Premio Darwin del año. Los titulares habrían sido algo así como «Idiota muere dentro de un traje espacial en su sala de estar, solo.»
Afortunadamente Tim consiguió quitarse el caso antes de morir asfixiado, «lo que me permitió vivir otro día».
Tiempo después de haber comprado el traje Tim comenzó la serie fotográfica Everyday Astronaut, un repositorio lleno de imágenes ingeniosas y simpáticas «para acercar el espacio a la tierra y comunicar la ciencia a través del humor y de la imaginación. Inspirar a nuevas generaciones y recordar a los adultos sus sueños de infancia.»
Everyday Astronaut también se puede seguir en Instagram.
Vía Happy Mag.