Con esta hazaña, diseñada para promocionar el nuevo M5, BMW USA se ha hecho el récord Guiness del derrape más largo completado en 8 horas, recorriendo de lado 375 kilómetros.
Para completar las 8 horas derrapando Johan Schwartz necesitó repostar combustible cinco veces sin dejar de derrapar. Para conseguirlo otro vehículo “cisterna” (otro BMW M5) pilotado por Matt Mullins y por Matt Butts debía mantenerse en paralelo con el M5 de Johan Schwartz, derrapando también. Derrapando a la vez, sin estrellarse y logrando que el combustible pasase de un coche a otro. Maravilloso.