Teniendo en cuenta los resultados que está obteniendo China en los últimos años con su programa espacial hay que tomarse en serio casi cualquier declaración al respecto que venga de sus responsables… pero algunas cosas se antojan demasiado optimistas.
Como por ejemplo las declaraciones de Chen Hongbo, de la Corporación de Ciencia y Tecnología Aeroespacial de China, que recientemente hablaba de un avión espacial que según él entraría en servicio en 2020.
Conceptualmente es similar a los transbordadores espaciales de la NASA o a los Burán soviéticos, pero según Hongbo el modelo chino será capaz de despegar como un avión en lugar de como un cohete como los otros.
Según él la nave será capaz de poner en órbita tanto carga como tripulantes y de devolverlos a tierra. Y dice además que será una nave más fácil de mantener, aunque no especifica más fácil que qué, lo que permitirá aumentar la frecuencia de los lanzamientos a un coste menor. Lo que se parece mucho a lo que la NASA decía de los transbordadores espaciales cuando le estaba vendiendo el proyecto al gobierno de los Estados Unidos, algo que nunca se cumplió.
Así que habrá que esperar, pero a priori yo diría que esa nave ni de broma va a volar en 2020 y que probablemente no consigan que sea tan fácil de mantener ni tan barata de operar como esperan.
De hecho, por todo lo que sabemos, no ha realizado ningún vuelo de prueba, y estamos ya en 2018, como quien dice. O por lo menos en navidades de 2017 si nos atenemos a los productos en venta en los supermercados, aunque esa es otra historia.
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