Imagen vía Dominic Worthington
Esta mañana –hora española– el fallo catastrófico del motor número uno –el izquierdo– del Boeing 777 que iba a realizar el vuelo BA2276 entre Las Vegas y Gatwick mientras iniciaba la carrera de despegue obligó a
evacuarlo de emergencia en la propia pista.
Claro que las llamas que salían del motor no debieron parecerle lo suficientemente serias a algunos de los pasajeros, pues se tomaron el
tiempo de coger su equipaje de mano antes de saltar por las rampas de evacuación.
Que ya sé que no le hacemos mucho caso a las demostraciones de seguridad que hacen los tripulantes de cabina antes de cada vuelo…
¡Pero esto es de sentido común!
Afortunadamente sólo ha habido que lamentar lesiones leves en dos de los 172 ocupantes. El avión, pues ya se verá…