Las Avani Eco Bags aspiran a ser la solución a las bolsas de plástico: aunque su aspecto es similar al de una bolsa de plástico convencional en realidad están fabricadas con fibras vegetales de yuca y resina natural. Son biodegradables y reciclables “de verdad”, y como no son tóxicas sirven como abono una vez que ya no son necesarias.
La forma rápida de deshacerse de ellas es poniéndolas en agua caliente, a unos 80°, aunque las bolsas desaparecen de forma natural principalmente devoradas por microorganismos, sin dejar residuos o convertidas en CO2 y agua en cuestión de meses.
Según el fabricante, estas bolsas biodegradables tienen el mismo volumen y «resisten “casi” tanto peso» como las bolsas convencionales fabricadas con plástico basado en petróleo.